Un texto es un texto

UNIDAD 3  TEXTO BASE 1

Concepto de texto. Dimensiones y niveles. Figura del cubo


Durante muchas oportunidades, a lo largo de las unidades anteriores, hemos usado el término “texto”. Pero, surge la pregunta: ¿Qué es un texto? En esta unidad del programa vamos a reflexionar sobre esta pregunta.

Preguntar y preguntarse qué es un texto parece, en primera instancia, una tontería. Desde que adquirimos la lengua materna, desde el principio de la escolaridad y desde siempre estamos en contacto con textos. Textos orales y escritos, literarios y publicitarios, textos que están hechos de imágenes, textos musicales y de gestos corporales, textos dichos con colores, textos cinematográficos, televisivos y radiofónicos, incluso, textos textuales.

Los podemos reconocer simplemente porque somos usuarios de múltiples lenguajes y porque la comunicación se piensa en textos.

Ahora bien. ¿Cómo definirlo?

Seguro que podemos formalizar una definición a partir de nuestra experiencia. Así podríamos decir, por ejemplo, que un texto escrito desarrolla un tema, que es algo más que una oración, que es un conjunto de oraciones relacionadas, a su vez organizadas en párrafos. Lo cual no estaría nada mal por cuanto, en parte, efectivamente eso es un texto. Sólo que aquí nos proponemos ir más allá de nuestra rica experiencia como usuarios y aprovechar los aportes de lingüistas y semiólogos que han indagado en esta definición.

Lozano señala: “Una primera aproximación al concepto de texto nos es proporcionada en un sentido amplísimo por Lotman y la llamada Escuela de Tartú (y la semiótica soviética en general, herederos de M. Bajtín), quienes lo considera como un ‘conjunto sígnico coherente’. De un modo todavía más abierto suelen referirse al texto como ‘cualquier comunicación registrada en un determinado sistema sígnico’. Desde ese laxo punto de vista hablan de un ballet, de un espectáculo teatral, de un desfile militar y de todos los demás sistemas sígnicos de comportamiento como de textos, en la misma medida, afirman, en que se aplica dicho término a un texto escrito en una lengua natural, a un poema o a un cuadro”.

Nosotros adoptaremos el punto de vista de aquellas tendencias científicas que consideran al texto como un objeto de carácter comunicativo y estructurado.

La característica de objeto comunicativo se relaciona con la noción de texto como producto de una actividad verbal de carácter social, que manifiesta una intención del hablante y se encuadra en una situación de comunicación en la cual se produjo.

La característica de objeto estructurado se relaciona con que, para garantizar el propósito comunicativo, hablante y oyente se atienen a reglas propias del nivel textual que rigen la construcción del producto.

Daremos entonces una definición de texto que tiene consenso de la mayoría de las corrientes:

Texto es una unidad lingüística comunicativa que concreta una actividad verbal con carácter social en que la intención del hablante produce un cierre semántico-comunicativo, de modo que el texto es autónomo.

Aclaremos también, que existen diferencias sutiles entre los conceptos de texto, discurso y enunciado, diferencias que, por razones operativas, no vamos a despejar en este curso pero que son válidas y podrán delimitarse en los cursos de Lenguajes, Semióticas y Análisis del discurso.

Sólo vamos a mencionar, a modo de ilustración, la postura de Teun van Dijk , por cuanto es el rumbo teórico que adoptamos para este tema. Según van Dijk, texto es “un constructo teórico” , un concepto abstracto que se concreta a través de distintos discursos y su estudio debe ser abordado interdisciplinariamente desde la lingüística, la socio-lingüística, la psicolingüística, la teoría de la comunicación.

DIMENSIONES Y NIVELES. FIGURA DEL CUBO

Algunas categorías de las que vamos a utilizar para describir ese objeto de estudio abstracto que es el texto ya las viste en la primera unidad cuando hablamos de las estrategias de producción y de las tareas del lector. Aquí las retomamos a propósito de la descripción del objeto texto.

Para acceder al análisis de la complejidad del texto, las autoras Mabel Marro y Amalia Dellamea han interpretado la teoría de van Dijk con el dibujo del cuerpo geométrico de un cubo para representar el concepto de que el texto presenta un formato no plano. (¿Cuándo eras chico, o no tanto, jugaste alguna vez con un cubo articulado que tenía unas celdas de colores? Bueno, este cubo textual sería algo muy parecido.

 

 

Este esquema figurativo cúbico que representa al texto presenta dimensiones y niveles.

Las dimensiones son aquellos aspectos que nos resultan visibles porque están en la superficie y se materializan en el aspecto notacional, morfológico, sintáctico, semántico y pragmático.

Los niveles son todo lo contrario, no son perfiles visibles sino abstractos porque son conceptuales, son esquemas que el escritor procesa en su intelecto, en la ideación mental del texto, pero pueden identificarse perfectamente desde la producción en los subprocesos de la planificación de la escritura y desde la comprensión cuando el lector procesa las representaciones con sus estrategias de cognición. Los niveles son: superestructural, macroestructural, microestructural, estilístico y retórico.

Dimensiones y niveles se interconectan y relacionan tanto para la producción del texto como para la comprensión.

Vamos a describir brevemente cada uno de estos aspectos:

Dimensión notacional: aquí se toma en cuenta las diferencias entre oralidad y escritura. Como todos sabemos no se escribe como se habla y viceversa, aunque está claro que la escritura requiere el cumplimiento de normas más estrictas, más exigentes que la oralidad por cuanto el interlocutor se encuentra ausente.

Esta dimensión la podemos reconocer en el texto por el cumplimiento o incumplimiento de las normas para ortografía, puntuación, tamaño y diversidad de letras, sangrías, exactitud en la transcripción de nombre y apellidos, numeraciones, estilos para el uso de mayúsculas y minúsculas y cualquier otra variedad de signos convencionales para señalar y diagramar el texto.

Esta dimensión interviene decisivamente en la cuestión de la escritura por cuanto su aparición satisfactoria ayuda a construir el significado y, por el contrario, su aparición insatisfactoria lo dificulta y lo traba.

Dimensión morfológica: refiere a la cuestión de la formación de las palabras y sus accidentes: género (masculino, femenino, neutro), número (singular, plural), tiempos y modos verbales, casos del pronombre, etc.

En general, tanto lectores como escritores tienen internalizados los mecanismos de formación de palabras, pero siempre es conveniente, en la etapa de revisión de la escritura, estar atento a este aspecto ya que los errores son frecuentes y sus efectos pueden afectar el sentido del texto.

Dimensión sintáctica: los usuarios una lengua manejan naturalmente una serie de reglas, algunas rígidas y otras flexibles, que le permiten reconocer y producir oraciones bien construidas.

Entre las reglas rígidas, tenemos la que indica que el artículo va siempre delante del sustantivo (usamos: la casa. Nunca al revés)

Entre las reglas flexibles podemos señalar aquella que nos permite romper el orden sintáctico típico, sujeto + verbo + objeto directo + objeto indirecto + circunstanciales, por otro ordenamiento que resulte más apropiado para la situación comunicativa en que nos encontremos.

Dimensión semántica: aporta una descripción en el nivel de los significados de palabras y grupos de palabras.

El nivel de los significados incluye aquellos que son convencionales y generales, como los que aporta el diccionario y también aquellos que surgen del acuerdo entre hablantes de una comunidad lingüística que pueden coincidir o no con los del diccionario.

Por ejemplo: “Estar del tomate”, por estar loco o “El diputado trucho”, por el diputado falso.

También operan en esta dimensión las relaciones entre la realidad y los significados lingüísticos que se construyen para referir esa realidad: éstos se denominan significados referenciales y son de índole interpretativa, con intervención de las categorías de conocimiento de mundo y mundo posible.

El componente semántico tiene una incidencia fundamental en la construcción del sentido del texto.

Dimensión pragmática: analiza las relaciones entre el texto como acto de habla y sus usuarios.

En esta esfera incide el análisis del contexto comunicativo y la interacción social, por cuanto es en este marco donde se materializan los actos de habla como verdaderas acciones intencionales que tienen consecuencias sobre los conocimientos, las opiniones y los comportamientos de las personas.

Pasamos ahora a la descripción de los niveles:

Nivel superestructural: analiza los formatos globales de los textos independientemente del contenido. Estos esquemas convencionales intervienen en la asignación del sentido porque, desde la comprensión, los usuarios los reconocen como formas típicas y desde la producción, los usuarios toman la decisión del tipo o formato que darán al texto, en paralelo a las decisiones relacionadas con el contenido o tema.

Nivel macroestructural: se relaciona directamente a la noción de tema o asunto general del discurso. En el proceso de comprensión de un texto complejo, un lector puede realizar la tarea de abstraer de ese todo, una idea global del tema que trata, tarea que como usuarios podemos reconocer como asignar o resumir un tema de un discurso.

Pongamos un ejemplo: Un alumno le cuenta esta clase de Redacción a otro que estuvo ausente y se produce este diálogo: -¿De qué se habló en la clase de Redacción? –El profesor explicó qué es un texto. La respuesta constituye la macroestructura o tema global, extraída del desarrollo completo de los contenidos de toda la clase de Redacción.

En el proceso de producción de un texto, la formación de la macroestructura global aparece en las etapas de planificación y revisión ya que es el sostenimiento y progreso del tema lo que guía el proceso de escritura.

Este nivel interviene en la asignación de coherencia y por lo tanto, permite reconocer un texto de un no texto.

También corresponde relacionar este nivel con el superestructural y con el microestructural.

Digamos que las superestructuras se “llenan” de contenido con las macroestructuras y éstas, a su vez, se despliegan en las microestructuras que pasamos a explicar.

Nivel microestructural: Este nivel también opera en la esfera de las significaciones pero en vez de manifestarse de manera global, como el anterior, lo realiza en el nivel local o micro, que quiere decir en la estructura de las oraciones y las relaciones de conexión y coherencia entre ellas.

Aquí podemos reconocer las señales textuales de causa – efecto, condición – consecuencia, medio – meta, indicadores temporales como los adverbios o recursos de producción como ampliación, ejemplificación, evaluación, etc.

Si la macroestructura global opera como un todo, la microestructura opera como las partes que especifican el todo.

Nivel estilístico: Los distintos campos de la actividad humana determinan una elección particular de medios léxicos, gramaticales, fonéticos y gráficos, es decir que imponen un uso particular de las dimensiones de los textos que se producen un ámbito social.
Aunque los usuarios pueden elegir entre varias alternativas posibles, esta elección no es absolutamente libre, sino que resulta previamente determinada por las características que imponen los tipos de discurso específicos y los contextos sociales también específicos donde circulan esos discursos.

Por esto podemos reconocer estilos bien diferenciados: periodístico, educativo, legal, científico, administrativo, etc.

Nivel retórico: Ligado al nivel estilístico, el nivel retórico también se relaciona con el modo en que cada escritor dice algo. Este nivel estudia las estrategias para persuadir al público sobre algún hecho o idea, para lograr aceptación de lo que se dice, para que crean o adhieran a las afirmaciones que propone el texto y eventualmente para que realicen acciones o ejecuten órdenes. Es decir, la esfera retórica influye en la eficacia del discurso, desarrolla mecanismos para convencer a la audiencia que siempre son intencionales.